The Niley Movie: "Quien me iba a decir" (2º parte)

Boquiabierta -¿Qué?

-Constanza, sé que lo que te está pasando es mucho para una chica de 17 años, es por eso que quiero ayudarte- suspira -No te obligo a que me des ahora la respuesta- sonríe dulcemente -Quiero hacerte saber que, estoy contigo, te apoyaré en lo que sea- le toma la mano

Salta encima de él, y llora en su pecho

Sonríe -No te preocupes, no estás sola- le recibe con el mismo afecto el abrazo

Llega la directora -¡PERO NIÑOS! ¿Qué hacen aún aquí? ¿Acaso no escucharon el timbre?- los saca de ahí -Ash... los chicos de ahora...

Sonríe y comienza a susurrar -Gracias...

-No hay de qué- también le sonríe


Al día siguiente, en el almuerzo

-No tienes idea de cuan avergonzanda de lo que sucedió ayer, jamás quise hacerte sentir mal... empezando por tu nombre, y luego por haberte dicho... ya sabes-

-No te preocupes, no estoy molesto- le dice suavemente a Constanza -¿Puedo preguntar algo?

-¡CLARO!- responde entusiasmada

-¿Cuántos meses de embarazo tienes?

-3 meses, creo...- responde algo avergonzada

-¿Cómo planeas llamarlo?

-La verdad no he pensado en eso... solo pido que nasca sano- acaricia su barriga

Sonríe atontado -Que linda eres...- tose de mentira, nervioso -Es decir... que lindo de tu parte...

Ríe -Gracias... aunque, ¿sabes? aunque naciera enfermo, aún lo amaría. Seré su madre, y no me importa qué digan los demás, quiero ser una buena madre para él o ella...- llega Brandon

Le mira friamente -Constanza, necesitamos hablar

-No tenemos nada de que hablar

Le toma del brazo -Te estoy dando una orden...

Se levanta furioso de su silla -Oye suéltala, deja de actuar tan miserablemente- le dice enojado

Le mira insignificantemente -No te metas, tonto...- arrastra a Constanza del brazo

Apunto de llorar -¡SUELTAME! Nosotros ya no somos nada....

-Es de eso que quiero hablar- dice seriamente Brandon -Estoy dispuesto a volver, con la condición de que abortes


Constanza POV:

"Me puse frenetica al oír tal barbaridez. Sé que rompimos, y aún me duele, pero me duele más que el chico que amo, quiera asesinar a su propio hijo

-¡NO PIENSO HACER ESO!- le grité furiosa, mientras cada vez lloraba más

Sebastián, al oirme gritar. Llega rapidamente a donde estaba, con una postura furiosa. A pesar de que apenas lleve un día conociendolo, sin embargo él ya me conocía, ya llegó dentro de mi corazón. Es la única persona que me ha apoyado y estado a mi lado, creo que gracias a él, llevo las cosas bajo control, de alguna manera

-Alejate de ella, Brandon, sino juro que te partiré la cara

Me hace a un lado, bruscamente y se pone a la defensiva -Uh... que miedo- estira sus dedos y le toma de la camisa -No te metas con tus superiores, niño- lo suelta y le da la espalda

-Bien... te lo advertí- me quedé paralizada al ver cómo Sebastián se lanzaba encima de Brandon. Luego de haber caído al piso, Sebastián comenzó a golpearlo lo más que podía, ambos se golpeaban... y esta vez, el lindo cabello de Sebastián, jugó en contra de él mismo. Fue entonces cuando, de tan solo una patada, Brandon lo lanzó lejos, golpeandose la cabeza. Rapidamente Brandon se levanta y va hasta Sebastián

-¿Te crees tan fuerte ahora?- dijo rudamente

Desesperada al ver tales escenas, le grité -¡NO LE HAGAS DAÑO!

Comienza a caminar lenta y casi tiernamente hacia mí -No arruines tu vida, Constanza. Pronto saldremos de la preparatoria, tienes excelentes calificaciones, eres hermosa, ¡TIENES TODAS LAS POSIBILIDADES DE SER PROFESIONAL! No desperdicies todo lo que se te presenta. Si no lo haces, perderás el año, ya nadie querrá contratarte para trabajar, y solo te quedarás con una habitación, amamantando a una tonta criatura

-Es tu hijo...- le dije apunto de desfallecer

-Esa criatura- dijo apuntando mi vientre -No es nada mío, así que no me metas en tus problemas... No lo vuelvas a repetir- se separa de mí -Acabas de perder tu oportunidad de ser una mujer de bien- se va dándole una última patada a Sebastián, quien estaba tirado en el piso

Me quedé pasmada ahí, sin saber cómo reaccionar. Esas crueles palabras seguían retumbando dentro de mi cabeza. Quise analisar lo que había pasado, y saber si realmente había pasado, o si tan solo había sido una de mis peores pesadillas... pero no, pude reaccionar y vi el cuerpo de Sebastián tirado en el piso. Fui corriendo hasta él, y veía tristemente cómo se retorcía... todo es mi culpa -Dios mírate... estás todo golpeado, es mi culpa- cubrí mis ojos con ambas manos -Lo lamento... enserio

-¿Qué?- pregunta divertido Sebastíán -Toda mi vida he soñado con golpearlo, y estos golpes, en verdad, valieron la pena- reímos un poco

-Quédate aquí, traeré a la directora- cuando dí un paso para irme, sentí como la mano de Sebastián tomaba mi mano, y me acercaba hasta él

-No por favor, no me dejes solo. Estoy bien, solo necesito ayuda para levantarme

Suspiré -Bien, pero luego iremos a la enfermeria, y luego con la directora- tomé la mano de Sebastián para levantarlo, pero él se impulsó mucho, haciendo que quedaramos a unos pocos centímetros de distancia

Comencé a desesperarme. Con cada milésima de segundo que pasaba, nos acercabamos más, eso me asustaba... por un lado, sentía la ligera desesperación de besarlo, pero por otro tenía miedo... no quería que él me besara y después me dejara como Brandon, no... solo quería que alguien me apoyara en esos momentos difíciles. Me alejé de él -No lo siento, no puedo hacerlo- le miré avergonzada

Defraudado ante mi reacción. Sebastián se separó a unos cuántos centímetros -Yo lo lamento... no debí haberlo intentado. Ven. debemos ir a la enfermería, y no por mí, sino por ti, has estado viviendo emociones fuertes, y eso, no es nada bueno

-Estaré bien, puedo ir sola- le dije intentando librarme de su presencia. De repente la vista se me nubló, todo lo que veía estaba borroso, y moviendose como locos, me sentía desorientada

-Constanza...- dice preocupadamente -Estoy aquí, a tu derecha, no en frente...- me toma de la cara y me mira a los ojos -Estás muy mareada... ven conmigo


Sebastián POV:

Intentaba encontrar su mirada, pero no podía. Su mirada era vaga, y desorientada, movía las pupilas a todos lados, cómo si fuera un bebe explorando. Me sentía muy preocupado, esto es muy difícil para ella, como si fuera poco, llega el tonto de Brandon, y la confunde más. Esto es malo para el bebé

-Jamás me sentí de esta forma- dice frustradamente Constanza

-Es que jamás has estado embarazada antes. Te llevaré de inmediato a la enfermería- la tomé entre mis brazos, delicadamente, voltee a verla nuevamente, y me di cuenta que se había desmayado. Corrí rapidamente hasta la enfermería y la acoste en una camilla. La señorita me miró confundida, y no tuve otra opción que decirle lo que sucedía, eso sí, le pedí discreción para que Constanza no se alterara. A los minutos después, nos dejó solos. Y ahí me encontraba, justo como quería estar toda mi vida, tomado de la mano de Constanza, no exactamente en la manera que pedía pero bueno... observaba cada rasgo de ella, se me era imposible pensar que una chica de 17, que parece un ángel, esté embarazada...

Despierta desorientada -¿Seba...?

-Si, aquí estoy- le sonreí dulcemente

Mira a su alrededor y se desconcerta al darse cuenta que era la enfermeria -Por favor dime que no lo sabe...- apunto de llorar

-lo sabe, pero no te preocupes, le pedí discreción

Suspira aliviada -Gracias a Dios...- me mira agradecida y me abraza -Gracias por apoyarme en este difícil momento... eres lo mejor

-No te preocupes...- me acerqué lentamente hasta sus labios hasta que ella interpuso sus manos en mi pecho y nos separa

-Oye... no perdón, no quiero hacerlo... sé lo que sigue después. Y no quiero más de eso, tengo suficientes problemas como para tener más- me mira triste -No quiero volver a enamorarme...- comienza a llorar -No quiero volver a decepcionarme, lo siento- toma su bolso, y dispuesta a irse, atraviesa la puerta. Estaba estupefacto, no podía volver a separarme de ella, no lo podría soportar, así que corrí en su busqueda, y la besé. Sentir esos cálidos labios sobre los míos, era tocar el cielo... no podía creer lo que estaba pasando, ¡ESTABA BESANDO A LA CHICA DE MIS SUEÑOS! La chica que me robó el sueño cuando apenás tenía 4 años... Sabía que mi obsesión por ella no fue en vano. Cuando me separé de ella, solo pude mirarle a los ojos y esperar a que ella me dijera algo... pero no fue así, entonces yo hablé primero

-Toda mi vida he estado enamorado de ti, Constanza, necesitaba besarte... sé que fue atrevido... pero no me podía contener...

-No me quería enamorar de nuevo, solo quería pensar en mi bebé... pero- baja la mirada -Ya no puedo separarte de mi vida. Así que creo que... lo jugaré con todo esta vez...- ambos nos sonreímos y Constanza me besa dulcemente, como su personalidad... Dios... si esto es un sueño, no quiero despertar...